3 de septiembre de 2011

How did I get here?

A veces, cuando no tengo mucho que hacer o más bien tengo tantas cosas que hacer que opto por no hacerlas, me pongo a pensar. O mejor dicho, a no pensar. Me conecto, abro facebook, escucho pop, pongo a cargar una película. Me hago una paja, por qué tener pudor de decirlo. Cualquier cosa que meta en mi cabeza distracciones ínfimas y que me alejan de entonces pensar con el corazón. Entonces decidí hoy, aunque usted no lo crea, dejar todo eso. Me cansé de gastar momentos de ocio en esas sandeces. En realidad, me cansé de ser un idiota más de toda la masa (sin ánimo de insultar a la masa de no pensantes, o de demasiado pensantes quizá, simplemente dejo de manifiesto que me desagrada mi persona ubicada entre ellos, no es mi lugar en este mundo claramente). Me agobia no ser yo, gracias a Dios, y mi personalidad auténtica está volviendo a emerger, ¡aleluya!. Cuánto más rápido vuelva a ser un condenado freak y asquerosamente sensible e irracional, mejor, estoy empezando a enloquecer por no dejar que mis trastornos se apoderen de mí. No quiero pensar más con la cabeza, es momento de sentir. Estoy de novio carajo, es momento de amar. Y a mis amigos también. A la familia... Pero esto está difícil, por ejemplo, mi viejo me acaba de gritar, ¿cómo no odiarlo de a ratos?. ¿Cómo no estar mal siempre aparentando estar bien cuando en mi casa las cosas mejoran parcialmente un día y son un desastre los otros seis?. Y por semanas ni siquiera está ese día en que está todo bien... Me cuesta no recubrirme con un caparazón apático, está difícil. Pero no quiero estar más hundido, quiero emerger, así que voy a luchar. Carajo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario